El blog de Emilia Pardo Bazán
Los hechos son los siguientes: una joven de veintidós años comienza un viaje con sus padres, marido y un tío que les llevará, partiendo de Ourense, a recorrer media Europa -Zamora, Burgos, París, Burdeos, Venecia, Milán,...- hasta llegar cinco meses más tarde a Ginebra. Durante este trayecto escribe una bitácora, seguramente minuciosa y detallista, sobre lo que se encuentra en el trayecto.
Si la historia estuviese ocurriendo hoy en día seguramente la autora sería una Nani o una Inés con un fantástico blog y los afortunados lectores tendríamos sus contenidos casi en tiempo real a nuestra disposición para conocer por sus ojos cada ciudad, cada rincón, encontrados en el camino.
Esa chica, sin embargo, nació hace más de ciento sesenta años y sus textos, manuscritos, no llegaron a publicarse en ese momento. Con el tiempo esa mujer se convirtió en una de las más importantes escritoras de Europa de su época (y escritores, por supuesto) y alguna de sus obras está entre las más importantes del Naturalismo del siglo diecinueve (por ejemplo 'Los Pazos de Ulloa'). Me refiero, por supuesto, a Emilia Pardo Bazán.
Así que lo raro no es que en aquel momento esta señora no abriera un blog -por motivos evidentes- si no que tantos años después ese primer texto permanezca todavía inédito. Aunque será ya por poco tiempo, pues parece que la universidad de Santiago va a editar la obra en formato electrónico. Aunque a muchos nos guste más el papel -parece ser que a medio plazo también se imprimirá- hay que reconocer que el digital le pega a Pardo Bazán, moderna, transgresora y vanguardista en su tiempo. Estoy seguro de que, si fuese este próximo uno de enero el día en el que comenzase su viaje, abriría un blog -en caso de no tenerlo ya- para contar sus hazañas y aventuras.
El caso es que con esta publicación de sus 'Apuntes de un viaje. De España a Ginebra' (1873) se produce el mismo efecto que si ella estuviese hoy contándonoslo. Al fin y al cabo, accesorios aparte, no habrá tanta diferencia entre las gentes que ella encuentre en su camino y las que hoy allí pueda haber; las inquietudes y problemas serán seguramente similares. Ese blog tendría una doble calidad: lo que nos cuenta -único, pues ese viaje ya nadie lo podrá hacer- pero sobre todo cómo nos lo cuenta.
Aún tardará unas semanas en estar disponible. Supongo que da igual esperar un poco más después de tantos años. Así incluso podría decir que no es mi blog el que más tarda en actualizarse de la red. En cualquier caso espero romper pronto esta dinámica. Hoy, y tras darme cuenta de que los colores del otoño están en pleno apogeo y con probablemente muchas semanas de retraso, lo he dado por inaugurado, con tiempo todavía antes de que enciendan las luces de navidad y volvamos a cambiar de estación. Que usted lo disfrute.